Las esferas de conocimiento de la Economía Política y la teoría del discurso empiezan a presentar puentes de correspondencias en estudios muy interesantes desde la línea de investigación de una Economía Política Internacional con sentido crítico. El trabajo de Bob Jessop es un paradigma en este cruce de conocimiento entre Economía Política y teoría del discurso. Jessop es un lector atento de la obra del teórico del discurso Ernesto Laclau, esto lo encontramos principalemente en su trabajo titulado Cultural Political Economy: on making the cultural turn without falling into soft economic sociology . Un buen inicio para indagar en esta reflexión es incursionar en la sofisticada teoría del discurso de Ernesto Laclau y su lectura de la ideología política.
Noé Hernández Cortez
Flacso, Sede México.
Resumen
Análisis de la ideología desde la teoría del discurso de Ernesto Laclau
Noé Hernández Cortez
Flacso, Sede México.
Resumen
En el presente trabajo pretendo desarrollar la estructura teórica de la concepción de ideología en la obra de Ernesto Laclau. Para ese propósito desarrollo tres apartados, a saber: 1). El horizonte filosófico en que se ubica la obra de Ernesto Laclau; 2). Las categorías de análisis de la teoría del discurso postestructuralista desarrollada por este autor, y 3). La articulación teórica de ideología política como hegemonía para el análisis del discurso.
Palabras claves: Laclau, Ideología y hegemonía.
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La obra de Ernesto Laclau ha influido en distintas áreas de investigación como son la teoría política, la teoría del discurso, la sociología política y la ciencia política. El punto de partida de madurez intelectual de Ernesto Laclau, de lo que será el inicio sistemático de su arquitectura teórica, fue en 1985 con la publicación de Hegemonía y estrategia socialista. Hacia una radicalización de la democracia, obra que escribió en coautoría con la filósofa política Chantal Mouffe. Sobre esta arquitectura teórica que es el pensamiento de Ernesto Laclau me detendré sólo a analizar en el presente trabajo la estructura teórica de la concepción de ideología. Para ese propósito desarrollo tres apartados, a saber: 1). El horizonte filosófico en que se ubica la obra de Ernesto Laclau, 2). Las categorías de análisis de la teoría del discurso postestructuralista desarrollada por este autor, y 3). La articulación teórica de ideología política como hegemonía para el análisis del discurso.
El horizonte filosófico
Lo primero que advertimos en el pensamiento político de Laclau es que este se constituye a partir de una lectura crítica de la modernidad. Su lectura de la modernidad le permite, junto a Chantal Mouffe, realizar una crítica radical de los esencialismos que propagó el Iluminismo filosófico del siglo XVIII. Y cabe aclarar que empiezo con la frase advertimos, porque considero relevante iniciar señalando que su teoría del discurso se configura a partir de esta lectura de la modernidad, pues será en el discurso filosófico en donde se gestarán las categorías fundamentales de su teoría política que corre pareja con su teoría del discurso. En lo sucesivo señalaré lo que considero las nociones claves del andamiaje filosófico del pensamiento político de Laclau, la crítica al esencialismo filosófico, la visión fragmentada del mundo social, la naturaleza del texto y la noción de hegemonía.
El esencialismo filosófico construyó categorías universales y fijas que determinaban las condiciones de posibilidad del conocimiento del mundo político. De esta manera la razón del siglo XVIII diseñó las nuevas categorías políticas universales como son el contrato social, los derechos universales del hombre, la democracia, la libertad sin considerar los matices de su contingencia histórica. Siguiendo a David Howarth (2009), la crítica a los universales que configuraron la idea moderna de la comunidad política, por parte de Laclau y Mouffe tuvo como implicaciones filosóficas una atenuación de la modernidad, el argumento es que en lugar de mirar los ideales modernos como utópicos era importante configurar una noción política ligada al mundo accidentado de los sujetos. Para Laclau los universales son la versión secular que sustituye el significado trascendental que Dios otorgaba al sujeto. Así, en una época postmetafísica como bien lo observó Richard Rorty (1967), el significado pierde esa trascendencia filosófica y empieza a tener contornos bien definidos, en donde el significado es un producto del discurso del sujeto, desapareciendo con ello el significado trascendental conferido por Dios. Estamos entonces frente a una ontología de lo social en donde el productor del significado ya no es Dios, sino el sujeto en el sentido cartesiano: el hombre cuyo atributo más importante es la razón, pero entendida como pensamiento analítico, apetitos volitivos y emotivos.[1] Los esencialismos habían borrado del horizonte de comprensión las diferencias que marcan el mundo social, asi por ejemplo los derechos universales del hombre como argumenta Iris Marion Young (2002) invocaban una idea absoluta de hombre, borrando las diferencias de los particularismos propios de las minorías que no se sujetaban a estos derechos trascendentales y absolutos. [...]
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